miércoles, septiembre 27, 2006

Desesperación

Mientras mi mente se encuentra en un lugar muy lejano en la pizarra
(dicho sea de paso, en la galaxia de un punto),
el tiempo corre incesantemente en un diminuto dispositivo móvil
y aunque, antes lo miraba como costumbre,
ahora es un vicio...

Este vicio fue su culpa, ya que a la misma hora la veía siempre en algunos días.
Por esta razón mis ojos se tornaban a mirar el fono cada 3 segundos.

La cosa es que se cumple el tiempo habitual.
Me levanto.
Camino.
La busco.
Mis ojos recorren todo el lugar intentando encontrarla, verla, observarla, saludarla, abrazarla, tocarla...

Pero me doy cuenta que no ha llegado y mi ilusión, que me atormentaba durante las 23 horas, 59 minutos y 59 segundos + 1(s), fue hecha vana, solo para agarrarme para el fideo...

Entonces, ¿Por qué pasa todo esto?: ¿Será para joderme la vida?
o ¿sucede algo que le gusta tenerme como títere?

Hay tantas cosas raras dans la vie que mi mente se ha visto envuelta en un abismo profundo, donde ningún humano ha podido salir.

¿Podré salir yo?
Resulta fácil entender que mi desesperación me ha llevado a pensar estas cosillas muy raras que ocurren en mi mente, pero es lo que hay, aparte de neuronas voladas que piensan en ella.